Hace ya una semana que en R. Dominicana no hace más que llover. Parece que todo está tan triste que ni el sol se atreve a mostrarse.
Es curioso que cuando hace mucho que no llueve, el cuerpo, el alma y el corazón se alegren por esa agua bendita...y cuando no deja de llover, esta misma alma se empapa de lágrimas...
Que bueno salir a la calle y dejarse mojar por esa agua...que llena los poros de vida.

1 comentario:
Vaja, vaja amb l' Elena... ara només li falta la gavardina i el barret per fer igual que els de "Cantando bajo la lluvia". Jejejeje.
Si realment et vas mullar espero que no t'hagis costipat.
Abraçadissima!
Publicar un comentario